El laboratorio de valresa es el verdadero motor de desarrollo del grupo. En él se desarrollan más de 300 formulaciones al año, que luego se transforman en barnices listos para usar y que posteriormente son adaptados a las necesidades y características de los diferentes países.
Nos interesa probar nuevas ideas y ver si funcionan. De esta manera hemos desarrollados nuevos barnices que han cambiado la forma de pintar de nuestros clientes. Un fondo de poliuretano que no necesitar ser lijado, un barniz acabado con una dureza superior o unos barnices ignífugos son un ejemplo barnices que han supuesto un ejemplo de innovación en el sector.
El verdadero laboratorio de desarrollo de barnices para la madera, está cuando además se incorpora la aplicación sobre la madera a la investigación. Formulas que una vez desarrolladas son aplicadas por nuestros expertos en aplicación de barnices, que nos indican las ventajas sobre los productos de la competencia.
Algunos barnices tardan más en salir al mercado porque no queremos que estos sean utilizados por nuestros más de 6.000 clientes sin que se hayan hecho todas las pruebas de calidad que nos aseguren que cumplen los requisitos más exigentes.
Nos motiva mucho mejorar, porque sabemos que los mejores barnices están por hacer.